Preguntas


        
      
 ¿Qué tanto puedo caminar? Hasta que pierda mis fuerzas. Hasta que no tenga razón para caminar más. Hasta que pueda ver su rostro nuevamente. Hasta que la batalla haya terminado. Y aun así…si aun así…debo seguir caminando. Porque me queda un universo por descubrir. Lugares por restablecer. Cosas por conocer. Asique mientras tenga vida, mientras pueda respirar cada día, debo seguir caminando.

   ¿Qué tanto debo soñar? Hasta que mi imaginación no exista. Hasta que no haya nada que escribir. Nada que contar. Hasta que las historias no causen curiosidad o las ideas no vuelvan a llegar. Quizás hasta que no tenga nada más que buscar o desear. Cuando descanse en sus brazos por siempre. Cada amanecer. Cada anochecer. Incluso en ese momento, continuare soñando, porque una nueva etapa apenas estará comenzando.

   ¿Cuándo dejare la tristeza? Cuando no haya sufrimiento. Cuando alguien deje de pensar que no existe tal sentimiento. Cuando no tengamos que ser azotados para aprender. Porque ¿de qué otra forma nos detendríamos a escuchar? ¿De qué otra forma? Si somos testarudos por naturaleza.

    ¿Cuándo dejare de buscar? Lo más probable es cuando lo encuentre. Pero ¿Qué pasara cuando lo haga? Supongo que me faltara mucho más por conocer. Tanto conocimiento, no podría entrar en mi cerebro. Tanta sabiduría sería imposible de adquirir. Así que ¿Cuándo dejare de buscar? Cuando junto a mi ella vuelva a estar…

   ¿Cuándo dejare mi espada? Cuando no haya más batallas. Cuando la paz sea declarada en todos lados, he incluso cuando eso pase, conociendo lo que se aproxima y de quien puede tratarse este acto de estabilidad, guardare mi espada en mi cintura preparado para lo que viene o para dar mi vida por EL que viene.

         ¿Cuándo dejare de amarla? Esa es una sencilla respuesta. Nunca…

Comentarios